Orizaba, Veracruz / Jacinto Romero Flores.- Tras la conmemoración de los hechos sangrientos que se vivieron en el municipio de Rio Blanco, el siete de enero de 1907, hoy en la actualidad los obreros de todo México no tienen motivos para celebrar esta fecha, debido a que en este momento el sector obrero es el más castigado después de los campesinos.
Así lo señalo el integrante de la Comisión Ejecutiva del Partido del Trabajo en Veracruz Jorge Isidro González Rojas, quien agrego que hoy más que nunca hay un repudio hacia la política neoliberal del gobierno de Felipe de Jesús Calderón Hinojosa porque solapa la explotación y propicia la desaparición de los verdaderos sindicatos.
Recordó que el 7 de enero de 1907, los obreros de aquella época pidieron la intervención del gobierno porfirista para atender sus justas demandas, a lo cual recibieron no el apoyo que solicitaban, sino la brutal represión.
Sin embargo, mencionó, que hoy en día los actos conmemorativos que se llevan a cabo sólo “son una burla para aquellos obreros y sus familias que sufrieron muerte, represión y persecución, con un acto oficial que sólo sirve de escaparate para políticos y pseudo líderes sindicales traidores al movimiento obrero, que de palabra se dan golpes de pecho y se desgarran las vestiduras, mientras que en los hechos son cómplices de la explotación”.
Remarcó que la falta de una justicia laboral solapada por el gobierno encuentra eco en el silencio cómplice de los sindicatos como la CROC, CROM y CTM, que permanecen indiferentes ante la violencia de los derechos de los asalariados.