*Sacerdotes piden por la salud del obispo
Orizaba, Veracruz.- En el segundo domingo de Cuaresma, las lecturas del Señor son claras, recordando sus fieles que los verdaderos adoradores, aman al Padre en Espíritu y verdad. Recordando que Dios es Espíritu y por eso tales son los adoradores que busca, reiterando que nuestros ofrecimientos son el sacrificio de la oración.
Dentro de la Eucaristía dominical presidida por el Padre Javier Onofre Rector del Seminario Menor, recalcó la importancia de tener una preparación del alma, durante este tiempo de espera, con lo cual llegaremos a vivir una Semana Santa en plenitud y paz.
“Nosotros hemos sido llamados a la vida y a la luz que resplandece en Cristo transfigurado; hemos sido llamados a convertirnos en hijos de Dios junto con el Hijo de Dios”
El Rector del Seminario Menor también abundó sobre la fortaleza que debemos tener los católicos, específicamente ante las enfermedades o malos momentos que vivimos a diario: “en muchas ocasiones nos alertamos ante las malas noticias, cuando nos dicen que tenemos una enfermedad o un familiar está pasando por algo grave, es ahí donde nosotros debemos de encontrar la fortaleza en Dios, saber que todo lo que nos pasa Él lo permite, porque lo cree conveniente”.
Posteriormente dijo: “Es necesario que nos decidamos a dar el paso para servir a Dios, dejarlo todo por nuestro Señor, de esta forma conoceremos el verdadero amor que nos tiene y su infinita misericordia”.
Dentro de la Eucaristía se pidió por la Salud de Don Marcelino Hernández Rodríguez Obispo de nuestra Diócesis, quién se encuentra delicado de salud. En todas las celebraciones que se realizan en la Diócesis se está rezando por la salud de tres sacerdotes, el Padre Salomón Lemus quien se encuentra desahuciado, así como el Padre Félix Vásquez que cada vez es menor su participación dentro del ministerio.
La invitación es para las familias cristianas a orar la salud de nuestros sacerdotes y pedir la pronta recuperación de nuestro Pastor.
